Facebook en España cerró canales a distintas personas por sus opiniones. Por ejemplo cerraron la cuenta de Josep Pàmies, la de Miguel Celades y la de Gregorio Placeres, por contravenir las normas de la comunidad. No se sabe qué normas de la comunidad se han violado porque Facebook ni escucha ni contesta. Cierra y punto.
Es cuando cierran la página de Josep Pàmies quedándose con sus datos, archivos y contactos -sin razón alguna y sin posibilidades de defensa- que enviamos un burofax para reclamar la devolución de datos y la cuenta, y en ese caso nos contestó Facebook de Polonia diciendo que quien debía solucionar el conflicto era Facebook de Irlanda porque en España no existía sede. Así que nos pusimos en marcha y presentamos demanda en los juzgados de Madrid y fuimos a comprobar la existencia de sede española de Facebook que está en Paseo de la Castellana nº 35 junto a la Plaza de Emilio Castelar. Somos muchos los ciudadanos que hemos confiado un poco en facebook haciéndo entrega de todos nuestros datos personales para compartir conocimientos o para emprender negocios limpios y transparentes y no para que se comporten como una mafia represora digital. Merecemos un respeto que si es necesario defenderemos.
De no llegarse a un acuerdo continuaremos hasta el final, incluso solicitando la cancelación de las condiciones generales de contratación de Facebook, e incluso solicitando su cierre en un procedimiento posterior en atención a la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Ahora es el momento de que todos los perjudicados por Facebook, se unan y denuncien este abuso.