El delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Saúl Montúfar Mendoza, supervisó los mercados Central y de la calle Durango, en la colonia Progreso, de Acapulco, para verificar que los comerciantes no abusen de los precios e incrementen los costos de la canasta básica.
Montúfar Mendoza comentó que además de revisar los precios de proveedores para calcular el valor del producto, se calibran las básculas para asegurarle a los clientes que el peso que se llevan es el correcto, sin embargo, manifestó que las que no cumplen el reglamento, son inmovilizadas, además de infraccionar a los dueños del negocio.