(IRZA).- La corrupción en Teloloapan ha llegado a grados inexplicables, tal es el caso que el alcalde perredista Robell Urióstegui Patiño, confabulado con su tío Víctor Rafael Mendoza Patiño, se roban hasta las tumbas de muertos del panteón, denunciaron los integrantes de la familia Espinosa.
La familia Espinosa, se encuentra desconcertada porque dijeron que de forma arbitraria, el alcalde instruyó que se le expidiera el título de propiedad de un terreno del panteón municipal a nombre de su tío Víctor Rafael Mendoza Patiño, cuando en ella descansan los restos de los parientes de quienes denuncian, su abuela Lucila Espinosa Basave, su padre Héctor Espinosa Figueroa y su tío Horacio Augusto Espinosa Figueroa.
Por el caso piden el apoyo del gobernador Héctor Astudillo Flores, del presidente del Tribunal Superior de Justicia, Robespierre Robles Hurtado y del Congreso local, para evitar que se sigan atropellando de esta manera sus derechos.
’Hasta parece que estamos viendo la película de La Ley de Herodes y el alcalde es Varguitas’, mencionaron.
El terreno consta de seis metros de largo por cinco metros de ancho, localizado en la Tercera Sección del Panteón Municipal de Teloloapan, donde todavía en vida su abuela, la señora Lucila Figueroa Basave, construyó una capilla, sitio que sería su última morada junto a sus hijos.
El pasado 10 de mayo, Día de las Madres, la familia Espinosa acudió a dejar flores a su abuela al panteón municipal, pero se llevaron la sorpresa que no podían entrar a la capilla porque tenía candado, razón por la que tuvieron que cantarle las mañanitas desde afuera y acomodar como pudieron las flores.
Por la situación acudieron al Ayuntamiento, donde una de las integrantes de la familia pidió hablar con el alcalde, pero le argumentaron que el presidente municipal no se encontraba, sin embargo, un funcionario le dijo que esa tumba ahora era propiedad del señor Víctor Rafael Mendoza Patiño, tío del edil perredista.
A pesar de que la familia Espinosa tiene un título de propiedad o de perpetuidad del terreno del panteón, el alcalde instruyó que se le expidiera a nombre de su tío Víctor Rafael Mendoza Patiño, otro título de propiedad o perpetuidad posterior para reemplazar el original, el que con anterioridad había sido emitido por el Ayuntamiento de Teloloapan a nombre de Yuridia Espinosa Altamirano, con el número de oficio 742, el día 27 de enero de 2016, mismo documento que fue protocolizado ante notario público, para mayor legalidad.
La familia Espinosa realizó ese trámite tras la muerte de su tío Horacio Augusto Espinosa Figueroa, pero al notarlo, el tío del alcalde, haciendo valer su poder en la administración local y en la región, mandó traer a un representante del Ministerio Público del Fuero Común, además de una mujer que trabajó con su abuela Lucila Figueroa Basave y le exigió que le entregara las llaves de la capilla o de lo contrario, la amenazó con meterla a la cárcel.
Pero el tío del alcalde no paró ahí, sino también amenazó a vecinos del difunto Horacio Espinosa Figueroa y les aseguró que ahora a él le pertenecía esa capilla y que no quería que nadie se acercara y que si tenían llaves se las entregaran, porque de lo contrario se iban a meter en problemas.
Además de pretender adjudicarse la capilla en el panteón municipal de la familia Espinosa, el tío del alcalde perredista de Teloloapan también intenta cobrar la póliza del seguro de vida Horacio Augusto Espinosa Figueroa, quien hace meses vivió un caso de negligencia médica en el Hospital de Alta Especialidad del ISSSTE ’Centenario de la Revolución Mexicana’, donde después de darlo de alta falleció.
Días antes de que muriera el profesor Horacio Augusto Espinosa Figueroa, el tío del alcalde, ingresó una hoja de póliza a la aseguradora Mafre, con oficinas ubicadas en Plaza Guerrero, en Chilpancingo, donde se puso como beneficiario al 100 por ciento en el Seguro de Vida Institucional que por ley se le da a los maestros jubilados.
Y es que el fallecido profesor Horacio Espinosa Figueroa, quien era soltero y sin hijos, confiando en que el tío del presidente conocía todo el movimiento del Sindicato de Jubilados del ISSSTE, le pidió que hiciera todas las gestiones de su seguro de vida institucional y ahora hasta su tumba se quiere quedar, abusando de la confianza que le otorgó el difunto. (www.agenciairza.com)