Hermelinda Martínez Colombres, vocera de los paristas del Poder Judicial que irrumpieron en San Lázaro durante la toma de protesta de la presidenta Claudia Sheinbaum, fue contratada de manera irregular por el Poder Judicial sin contar con los estudios que requería el puesto; encima, su pareja ingresó posteriormente a su mismo lugar de trabajo e incluso se desenvolvió en su mismo puesto; pese a ello, en conjunto perciben 116 mil pesos mensuales según la Plataforma Nacional de Transparencia, misma donde además, se presume la presencia de otro familiar.
Hermelinda Martínez Colombres, sindicalizada, quien labora como Oficial Judicial C en el Juzgado Tercero de Distrito en el Estado de Hidalgo con residencia en Pachuca, alcanzó relevancia al ser cuestionada y citada por diversos medios, aunque en redes sociales no pasaron desapercibidas sus declaraciones, mismas que recibieron desde burlas hasta críticas, especialmente por la invención de escenarios que no ocurren en este país, pero que son parte de la narrativa de la oposición.
Las primeras inconsistencias
“Pudiéramos estar en condiciones pero las leyes secundarias no precisan quiénes podemos ser candidatos… obviamente van a ser los designados por dedazo… eso es lo que quieren porque los trabajadores de pie… Yo en lo personal tengo 28 años de servicio ¿me va a pagar la candidatura? ¿quién me va a pagar los medios?”, recuperó 88.9 Noticias sobre la primera respuesta que ofreció Martínez Colombres ante los medios de comunicación.
Más allá de que desconozca que para las propuestas de jueces y magistrados cada Poder de la Unión, de manera independiente, establecerá los mecanismos para escoger a los mejores perfiles, los cuales irán a la boleta que se votará, y que tienen prohibido realizar cualquier tipo de campaña que no sean los espacios que se les designarán para que haya equidad, la susodicha confirmó, de su propia boca, que lleva 28 años trabajando para el Poder Judicial.
Pero hay un problema.
En la declaración patrimonial presentada apenas el pasado 28 de mayo, de la que se manifiesta que la información es veraz, so pena de sanciones que vienen desde la remoción hasta las denuncias con el Ministerio Público, todos los empleos reportados fueron dentro del Poder Judicial y en todos ellos se requiere el grado de Licenciatura en Derecho.
Pero sus estudios fueron culminados hasta 2005 cuando ella ingresó en 1996, por lo que 9 años estuvo laborando irregularmente dentro del Poder Judicial desempeñando cargos para los que no cubría con el perfil al haber señalado las responsabilidades de Actuario Judicial interina, Oficial administrativo de base, y Oficial Judicial C.
El nepotismo
En la versión pública de su tesis por la UNAM, misma de la que no realizamos verificación sobre si ha sido plagiada o no, hay un dato relevante que resalta de la sección de “Agradecimientos”.
Allí brinda un mensaje a su pareja sentimental, la cual ha estado a su lado varios años y que responde al nombre de Damián Aldama; posterior, agradece a Paty Martínez por haberla acogido “como a una hija más”, siendo la mencionada su suegra.
De lo anterior se deduce que su pareja lleva por nombre Damián Aldama Martínez, dato relevante porque justamente el nepotismo ha provocado que al poder se le conozca con el mote de “Poder Familiar de la Federación”.
Porque en el Primer Tribunal Colegiado Vigésimonoveno Circuito Pachuca, labora Cipriano Damián Aldama Martínez, quien es Secretario Particular de Magistrado de Circuito.
Tanto Hermelinda como Cipriano Damián laboran de hecho, en el mismo inmueble ubicado en Luis Donaldo Colosio 1209, Pachuca.
Cabe señalar que, a diferencia de otros casos, Cipriano Damián ingresó al Poder Judicial al menos una década después de ser la pareja de Hermelinda, por lo que a diferencia de otros casos donde bien pudieron conocerse allí, aquí se trata de nepotismo plano y llano.
Y es que el susodicho ingresó en 2009 como Chofer de funcionario y así se mantuvo durante 5 años -esto es, cuando Hermelinda ya llevaba 13 años laborando-.
Empero, por un corto periodo se desempeñó como Oficial Administrativo en el Juzgado Tercero de Distrito, esto es que laboró exactamente en la misma área y puesto que Martínez Colombres.
Los beneficios del Poder Judicial
El Poder Judicial es un paraíso laboral. No sólo se permite el ingreso de trabajadores por amiguismos y compadrazgos, sino que el nepotismo ni siquiera es mal visto -por algo la mitad de sus trabajadores tienen a un familiar trabajando en la institución-.
Es así que aparte de brindarles la oportunidad de ingresar incluso a sus parejas y permitirles laborar con la mayor cercanía, un ingreso conjunto, nada despreciable, de 66 mil pesos en remuneraciones, en realidad se convierte en un monto mensual de 116 mil pesos gracias a otras percepciones adicionales.
Cabe señalar que existe otro personaje en el Poder Judicial, de apellidos Aldama Martínez, pero este trabaja en la Ciudad de México. Se desempeña como Oficial Judicial C y sólo cuenta con la preparatoria trunca cuando debería tener la licenciatura para desempeñar su cargo; sin embargo, así como Hermelinda, mensualmente percibe más de 50 mil pesos pese a su prepa trunca. Ingresó en 1996 al Poder Judicial, mismo año en el que Hermelinda también entró y también sin contar estudios profesionales en ese entonces.