Según los investigadores del Instituto Polar, cerca de 200 renos salvajes del archipiélago Svalbard en el Glacial Ártico perteneciente a Noruega, murieron de hambre por el actual cambio climático.
El esporte se dio luego de realizar en una cartografía anual de población bdenrenos salvajes en la localidad, llegando así al resultado inesperado y lamentable.
Con el cambio climático, hay mucho más lluvia de lo normal, ésta cae sobre la nieve y forma una capa de hielo en la tundra. Con eso el pasto queda en muy malas condiciones para estos animales, y el liquen, otro alimento de los renos, es otro elemento imposible de utilizarse.
El número de renos en la región de Svalbard, territorio dos veces más grande que Bélgica, ahora alcanza los 22 mil ejemplares.