Cómo ser padres de un hijo con necesidades especiales


Sin dejar de ser pareja

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Cómo ser padres de un hijo con necesidades especiales
Educación
Septiembre 11, 2015 19:28 hrs.
Educación ›
Psicóloga Marina Castro Ricaño › diarioalmomento.com

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Un hijo con necesidades especiales no hace que una pareja se destruya, la falta de comunicación de las emociones ante la situación sí.
A veces la pareja con un hijo especial, cuando están enfrentando el conflicto se paralizan y tratan de acallar todos sus sentimientos, pues sienten tanto dolor, culpa, enojo, como para expresar sus sentimientos en palabras y tienen mucho miedo de herirse, pues frecuentemente pierden la paciencia y se acusan uno al otro diciendo tú tienes la culpa. Al no sentirse comprendidos, sentirse rechazado por el otro. Incluso los tiempos de cada quién parecen interferir con el diálogo: cuando el ánimo de uno está arriba –objetivo, optimista, dispuesto a hablar – el otro generalmente se encuentra sumergido en las profundidades de la depresión. Es como vivir en un sube y baja emocional.
¿Qué es comunicación? La emisión de un mensaje, por ejemplo:
Te comunico nuestro hija tiene Parálisis cerebral el diagnóstico lo dio hoy el Dr. ¿Qué vamos hacer?
Ante esta situación de que nace un niño(a) con Parálisis Cerebral el impacto de la noticia es tan fuerte que se corta la comunicación y se inmoviliza la pareja.
Cuando la comunicación verbal es insatisfactoria, la verbalización toma la forma de discursos; así son las parejas que hablan mucho pero dicen poco; intensas luchas de poder llegan a dominar la relación y ambos se culpan, juzgan y desacreditan. Nada pone más distancia en una relación que las evaluaciones, juicios, críticas y acusaciones. Estos patrones ineficaces de comunicación hacen que la pareja interprete erróneamente al otro, no satisfaga sus necesidades mutuas ni resuelva sus problemas, mientras la hostilidad y el resentimiento van en aumento. La comunicación verbal insatisfactoria pone en evidencia una relación que se desmorona.
El manejo de tres habilidades básicas de comunicación:
1.- Verbalizar los sentimientos. De niños aprendimos a ser cautelosos ante lo que podemos hablar o compartir, sin correr el riesgo de sentirnos incomprendidos o rechazados. Esta actitud, aprendida a lo largo de la vida, nos enseña que es más fácil eludir y reprimir los sentimientos, que aprender a contactarlos para identificarlos y así poder expresarlos.
¿Porqué las personas temen tanto darse a conocer? El miedo a la cercanía emocional surge del temor al rechazo, del miedo a que lo revelado se utilice en nuestra contra, a no ser comprendido, o a que lo expresado se interprete como una acusación; la crítica es lo que provoca el temor.
Cuando hablemos con nuestra pareja, hablemos sinceramente desde el fondo de nosotros mismos; un mensaje que emana desde el yo siento…., yo pienso…., yo…. Tiene más probabilidades de ser escuchado porque no contiene elementos humillantes ni ofensivos, tampoco dice al otro lo que debe hacer; la expresión deja de ser una amenaza puesto que simplemente dice como nos sentimos con respecto a una situación determinada sin atacar, ridiculizar o criticar.
Lo que así se expresa no puede ignorarse ni negarse, se trata de un hecho desnudo que exige enfrentarse y que promueve la comunicación franca y directa. Esta postura permite un proceso de relación constructiva.
Lo que dificulta hablar desde el yo es que esto exige estar en contacto con nuestros sentimientos, y el miedo al rechazo, a la crítica, a no ser comprendidos, hace que antes que arriesgarnos a compartirlos aprendamos a hacer caso omiso de ellos a no escucharlos. En esta medida llegamos a olvidar que existen.
La intimidad en la comunicación de la pareja emana de la confianza plena, la cual se desarrolla con el tiempo; solo la confianza nos permite poner en manos de nuestra pareja nuestros sentimientos, temores y necesidades más profundas, pues sabemos que serán recibidas con afecto, aceptación y respeto.
2.-Escuchar.- Es estar atento, concentrado en lo que el otro dice. Escuche con los ojos haciendo contacto visual, con la cabeza diciendo sí; con la mente recordando lo que se dijo, haga preguntas, y cuando crea que ya no hay nada que escuchar, ¡Siga haciéndolo 30” más!
Cuando se escucha activamente primero se “escuchan” los sentimientos del otro y solo después se procesa la información; es mediante la percepción y aceptación de los sentimientos que se encuentran soluciones. El que nuestra pareja pueda expresar sus sentimientos y recibir comprensión, en lugar de censura, es un paso gigantesco hacia la comunicación verdadera.
3.- Actuar con respeto y aceptación. La intimidad emocional es una calle de dos vías: exponer los sentimientos es sólo la mitad, la otra es respetar y aceptar abiertamente los sentimientos compartidos; la verdadera intimidad requiere una aceptación sin límites. Al no compartir abiertamente nuestros sentimientos presentes, tal vez evitamos ser lastimados pero también nos privamos de la cercanía emocional: las penas pasadas y presentes se vuelven más soportables cuando se comparten con el ser amado. Lo que mantiene unida a la pareja es la amistad y el amor. Con el amigo se generan lazos de confianza, lealtad, franqueza y proximidad; el amigo escucha atentamente, olvida pronto los malentendidos y respeta los sentimientos del otro. Un amigo es con quien podemos compartir lo bueno y lo malo, las esperanzas y los temores, los goces y las aflicciones; el amigo se preocupa desinteresadamente por el otro, procura lo mejor para él y no juzga ni critica. Cuanto menos sean los elementos ocultos en nuestra relación, cuando menos se escarbe en el pasado y más se explore el presente, tanto más se nutrirá el crecimiento y desarrollo de nuestra vida en pareja. El estrés marital es normal en la pareja y universal en las familias que enfrentamos el proceso de aceptación y adaptación a un hijo con necesidades especiales. No nos demos nunca por vencidos ni sorprendidos por el hecho de experimentarlo. La pareja que desarrolla un vínculo fuerte puede sobrevivir a cualquier crisis que la vida le presente.
A continuación podrá usted con su pareja hacer la siguiente actividad “Practique darse diez formas de Amor” Primero uno y después el otro.
1. Escuche a su pareja sin interrumpir.
2. Háblele sin acusarla(o)
3. Dele lo que necesite sin escatimar nada.
4. Medite tranquilamente una idea que le de calma.
5. Conteste sin argumentar nada.
6. Comparta lo que tiene sin pretender recibir.
7. Disfrute de su vida sin quejarse.
8. Genere confianza sin dudar.
9. Perdone sin castigar.
10. Prometa sin olvidar hacerlo.

Libro “Cómo ser padres de un hijo especial sin dejar de ser pareja”, de psicóloga Marina Castro Ricaño. Editorial Trillas. Lo encuentras en Plaza del libro y en tiendas trillas online

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