Durazo, el primer eslabón

Igual que Anabel Hernández y otros periodistas que se han dedicado a la investigación, Luis Chaparro se ha convertido en una piedra filosa en el zapato de los narcopolíticos mexicanos que seguramente deben delirar por darle un escarmiento. México-norteamericano, ha dado sorpresas que han desnudado a muchos servidores públicos ligados con los criminales y que hoy están en serios problemas con las autoridades de Estados Unidos.
Ha hurgado en medio del peligro, en la frontera norte o en los lugares más comprometidos y afectados por la violencia y sus indagatorias han arrojado verdades que hoy mantienen preocupados a muchos personajes. Fue de los primeros que ingresó a la casa de Ovidio Guzmán, El Chapito y a un laboratorio de fentanilo, cuando el opioide comenzó a provocar una preocupación gigantesca en la Unión Americana, debido a la inmensa lista de muertos por su consumo.
Su trayectoria de 15 años le ha valido para descubrir una red criminal de extorsión a migrantes, orquestada por funcionarios mexicanos en la población fronteriza de Ciudad Juárez. Se dice que es de los pocos periodistas que ha logado entrevistas con las figuras más destacadas del crimen organizado, razón que lo convierte en un comunicador bastante confiable.
El domingo pasado emitió la noticia de que Alfonso Durazo Montaño, gobernador de Sonora, está sujeto a una orden de aprehensión del gobierno de Estados Unidos y de acuerdo con lo que él mismo afirma, la información está basada en datos de la Homeland Security Investigations, que en Estados Unidos lucha contra organizaciones criminales.
Por otro lado, de manera sorpresiva, el Presidente del vecino del norte, Donald Trump, canceló su presencia en el G-7 de Canadá. La Presidenta Sheinbaum se quedó como novia de pueblo, vestida y alborotada porque aparentemente tendría una reunión con el empresario. Dijo que éste prefirió atender los problemas que se han suscitado en el Medio Oriente.
No Obstante, Trump negó categóricamente que su no asistencia tenga relación con un posible alto al fuego entre Israel e Irán, con objeto de desmentir a Emmanuel Macron, quién fue el primero en elucubrar esta posibilidad. Pero de paso desmintió a la mexicana, quien lo afirmó en una entrevista.
Mientras tanto, en México, muchos analistas tomaron la noticia con beneplácito o como el anticipo de lo que viene y bastante duro, contra una lista muy larga de políticos mexicanos que se han dedicado, más que nada, a satisfacer las órdenes del ex presidente y de la sucesora.
Se ha mencionado que están en entredicho por sus ligas con los criminales, Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa. Ricardo Monreal, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados. Adán Augusto López Hernández, coordinador parlamentario de Morena en la Cámara Baja. El mismo Durazo y, en suma, casi todo el padrón de Morena.
Se sospecha, además, que lo que se ha cocinado en Estados Unidos a partir de la nueva Presidencia y que tiene que ver con nuestros delincuentes, comenzará a reflejarse ya. Código Magenta ha insistido en que a partir del próximo mes habrá verdaderas sorpresas, basado en informaciones de fuentes estadounidenses. Inclusive ha dado fechas precisas. Ya veremos.
El desaire de Trump a la Presidenta mexicana, a quien por cierto nada le sale bien, acabó por convencer que aquello de que es encantadora, no fue más que un cumplido sarcástico. Al día siguiente le dijo cobarde por temer a los narcotraficantes. Pero no es temor. Es el hecho evidente de continuar al pie de la letra las recomendaciones de su jefe desaparecido.
La versión de la orden de detención de Durazo, a través del portal Pie de Nota, de Luis Chaparro, levantó el ánimo de muchos mexicanos que han considerado que México ya no tiene remedio y está dejado de la mano de Dios, en manos de una señora que también quiere su destrucción.
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