El voyerista

Las estrategias, son acciones políticas, que buscan prever escenarios, adelantarse a los acontecimientos y buscar beneficiarse de ellos. Algunos son fáciles de prever, otros no tanto.

El cálculo que tiene Jesús Ortega, ex líder del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y parte de quienes controlan hoy a la organización, es que unos 4 millones de personas se han cambiado del PRD, lo que a su juicio, no es más que una manifestación de la democracia y de la libertad que tienen los ciudadanos para elegir a sus gobernantes.

No hace ningún juicio, sólo consigna lo que supone ocurre. Sin autocrítica, entiende que luego de la tormenta vendrá la calma y todos contentos. Y su negocio seguirá.

Una de las arcas que más beneficios les dieron en el pasado, fue el estado de Guerrero. Hoy, no la tienen por sus excesos y errores de un pragmatismo político, que les había venido dando resultado y de continuar sin hacer algo, podrían dejar de tenerla como forma de sobrevivir con recursos financieros frescos. El Distrito Federal, es otro espacio y parece que ahí también sufrirán daños severos a sus ingresos.

El pragmatismo político que el PRD nacional impuso a los estados, incluido Guerrero, le generó una crisis, que hoy los mantiene en un tris de convertirse, al menos en el estado de Guerrero, en la tercera fuerza, luego de ser la primera por 10 años consecutivos. Y eso cuesta mucho.

Ya en Guerrero, los candidatos, hacen su juego. Beatriz Mojica Morga, con su imagen fresca, pero aún sin la fuerza social, que reclaman las circunstancias, hace lo que se puede y busca, con más suerte que planeación ni estrategia, ganar espacios políticos, en una circunstancia adversa, luego de que muchos políticos de su propio partido le regatean el apoyo y hasta le juegan las contras, abiertamente.

Sin un amplio equipo experimentado en lides electorales y con un pésimo equipo de prensa, hace lo que puede. Y sin recursos financieros, entiendo, pues el oro de Moscú, no le llega, trabaja con una organización, que más bien busca encontrar dónde agarrarse, para el momento de la zozobra.

Pero aún es posible rescatar algo.

En el caso de Luis Walton Aburto del Partido Movimiento Ciudadano (PMC), vive su primavera ya planeada y lo que mencioné hace rato, cuando nadie observó que dejar libres, sin propuestas 22 distritos, era un anzuelo, que muchos han mordido. Y otros han querido, como Alejandro Mendoza Pastrana, pero al observar que se iba a ver muy carroñero, mejor reculó.

Como en el pasado y con una estrategia adecuada, de abrir las puertas a quienes no les dieron nada en sus partidos, principalmente en el PRD, como los actuales diputados federales, al ver la oportunidad, abandonaron la nave que les dio de comer y los sacó del anonimato. Eso tiene un costo, pero llena las alforjas temporalmente. Es una estrategia correcta. Y le puede dar al Movimiento Ciudadano (PMC), la posibilidad de bajar al PRD a la tercera fuerza, cuando en 10 años, fue la primera.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI), hace su juego. La fuerza federal, está de su lado. La fuerza local, la está construyendo con la experiencia de muchos años, de saber moverse en ambientes elevados, ahora quiere regresar a lo que conoce y trabaja con las herramientas que sabe son necesarias y adecuadas. Hay control, cosa que en otras organizaciones no. Quien se mueve, se sale de la foto. Y todos están quietos.

Muchos priistas y ex priistas, lo saben y por eso, piden tregua, y nuevas oportunidades. Las tendrán, aunque en su momento se ajustarán al costo que tengan que pagar. Como lo están haciendo, quienes en su momento se declararon independientes, apoyaron a Aguirre Rivero y supusieron que nadie los vio, hoy, apechugan, porque no hacerlo es un suicidio familiar.

El ambiente político se empieza a calentar. El primer debate, será un termómetro, para medir inteligencias, estrategias y mensajes de poder.

Por lo pronto, viene una semana relajada y de asueto. Por aquello de la Semana Mayor, en donde habrá algunos a los que les permitirá revisar sus estrategias, amarrar los hilos sueltos y quizá veamos un escenario sino diferente, en otras condiciones, cuando se regrese y se termine la religiosidad que es lo mismo que la política, pero con intereses diferentes, pero en la práctica similares. El poder, es la búsqueda de la religión y lo mismo de la política. Aunque se niegue aceptarlo. Gracias. Comentarios;

Facebook: Voyerista Comenta; Twitter: Alfredo Guzmán; Messenger: voyer54@yahoo.com.mx