**Reportaje publicado en el periódico "El Reportero", de Chilpancingo **homovidens@outlook.com @andrescampuzano
Andrés Mauro Campuzano Marquina
Con antelación en otras opiniones y ensayos he mencionado la turbiedad que existe desde la definición de periodista. Para ejercer la profesión de doctor se necesita un título y cédula profesional, al igual que con otras profesiones como son: abogados, enfermeras, maestros.
Pero para ejercer el periodismo en México y particularmente en Guerrero, la aserción de libertad de prensa y de algunos medios de comunicación han permitido que "cualquier" persona haga uso irresponsable de esta noble e importante labor. Con cualquiera no me refiero a un uso peyorativo del concepto, sino de personas cuya formación profesional o empírica nunca tuvo que ver con el periodismo o siquiera con un curso de prosodia, sintaxis o redacción. Las nuevas tecnologías y redes sociales acrecentaron en algunos directivos y jefes de información de medios la vorágine, la competencia sin razón con la única intención de ganar la "primicia" y con esto miles de "me gusta" en Facebook y "retweets" en Twitter con información parcial o falsa; ¡sí, falsa!
Octavio Paz lo definía como "el poeta del arrabal", pero Renato Leduc no se limitó a la poesía pues contribuyó de manera concreta a lo que debe ser un periodista. En su obra Historia de lo inmediato (1976), menciona sobre lo que le falta y le sobra al periodismo, donde afirma que un "periodista político es el historiador de lo inmediato" y subraya - (…) Es posible que a la producción periodística le falte hondura y le sobre superficialidad. La premura, festinación y oportunismo (he dicho oportunismo y no oportunidad) con que generalmente se realiza, serían la causa.
Y en estos momentos la superficialidad, imprudencia, falta de compromiso y arrogancia le están haciendo pasar uno de los peores momentos al periodismo en nuestro país y en Guerrero. Como personas, todos somos perfectibles, ninguna persona adquiere experiencia acumulando solo logros, es con los fracasos en donde encuentras el nicho que te hunde o te impulsa. En el periodismo pueden -y ocurren- errores ortográficos, errores en que el nombre de una persona, lugar o fecha pueden haberse difundido con imprecisión, pero para eso existen las cartas al director o a la redacción en las que se da fe de erratas para subsanar el ligero tropezón.
Pero una de las mejores formas para perder credibilidad se experimenta en las redes sociales, con esa instantaneidad con la que buscan ganar seguidores y no lectores.
La entrevista es un género, poderoso instrumento de investigación, y uno de los estilos más adecuados para publicar una entrevista; considero es en la que se respeta íntegramente las declaraciones de la persona entrevistada. A la hora de trascribir se pueden usar sinónimos, quitar muletillas, sintetizar quizás 4 horas de entrevista o más, pulir el trabajo. Acomodar una entrevista para ajustarla a la línea editorial de un medio constituye una actitud reaccionaria y que busca esparcir todo menos una clara visión de lo que se dijo.
Citaré el caso de la revista Proceso, medio internacional indiscutible en torno a una entrevista que le hicieran al doctor Rogelio Ortega, el entonces gobernador envió una carta en la que aclaraba lo siguiente:
- Señor director:
- Al tiempo de saludarlo, le hago algunas precisiones sobre la entrevista que me hizo la periodista Gloria Leticia Díaz y que se publicó el 27 de septiembre bajo el título: Ortega: "La intención del gobierno federal era arrasar la Normal" (Proceso 2030).
- 1. En ningún momento usé las palabras: "La intención del gobierno federal era arrasar la Normal", por lo cual es inválido usar las comillas, más aún cuando se trata del encabezado de la nota.
- 2. En ningún momento utilicé la expresión "baño de sangre".
- 3. Cuando me refería a lo que la reportera llama "diálogo vía internet", aludía a un chat de grupo de carácter estatal para temas de seguridad y gobierno, y no a uno federal, el cual no existe.
- 4. En la página 13, donde la entrevistadora pregunta: "- En enero Osorio Chong, ¿le pidió reprimir?", mi respuesta textual fue: "No, no reprimir", antes de la réplica que se difundió.
- Considero en general que la reportera no plasmó el contexto global de la entrevista, la cual duró una hora 58 minutos, y en la que abordamos una gran diversidad de temas de importancia tanto para el estado de Guerrero como para el país, por la situación que hemos vivido el último año a raíz de la tragedia de Iguala y que ha marcado mi entrada y ruta de gobierno.
- En lugar de ello, la nota se centró en un solo tema desde una visión que considero sesgada… La precisión con la que el gobernador dice el tiempo que duró la entrevista, el cambio de palabras entre lo que se dijo y lo que se publicó sí es sustancial, vaya un medio de alcance internacional no puede exponerse de esa manera y en la respuesta de la reportera que hizo la entrevista uno detecta que buscaban la "nota del día", el show como materia prima y no la calidad.
La reportera contesta:
- Señor director:
- Aunque ciertamente no debió entrecomillarse en el título la frase atribuida al gobernador, la misma no traiciona el espíritu de lo que manifestó y resume su información de que en un chat con el gobierno federal se le dijo: "La única forma es ir a tomar de una vez Ayotzinapa". (Téngase en cuenta que entre las acepciones del verbo "arrasar" se encuentran las de "entrar en casa ajena contra la voluntad de su dueño", "vencer o superar alguna dificultad o inconveniente", e inclusive la de "pacificar, aquietar".)
- También es cierto que él nunca empleó la expresión "baño de sangre", pero es legítimo denominar así a lo que consideró "una batalla campal" donde "va a haber heridos (…) posiblemente algunos muy graves y posiblemente algunos muertos; y seguramente de un lado y de otro (…) esto va a ser una matanza…".
La reportera anuncia que la entrevista tuvo una duración de 2 horas, 11 minutos y 30 segundos, da la hora, minutos y segundos precisos. Pero imprecisa fue la forma en que se presentó la entrevista, en ningún momento asumo una postura de defender al ex mandatario o a su equipo de comunicación social y política que tuvieron bastantes inconsistencias y errores de principiantes.
Pero el periodista no puede cambiar declaraciones o interpretarlas "legítimamente", como es el caso de la expresión "baño de sangre". El fragmento de esa entrevista que generó polémica por lo que se cambió y no por lo que se declaró puede ser consultado en el portal de la revista en internet.
Otro caso emblemático y que si es ejemplo de cómo hacer periodismo es el de la entrevista al político David Jiménez Rumbo, realizada por Alondra García Lucatero y publicada en el sitio de la agencia Quadratín[1] el 22 de julio de 2014. El ex senador de la república de manera iracunda habla sobre lo que no lucha su partido, el PRD:
- AGL.- Este martes apareció una lona en Chilpancingo con la imagen de su hermana, la diputada local perredista Ana Lilia Jiménez Rumbo. El rostro de la legisladora apareció rodeado por los rayos del sol azteca, su nombre en letras blancas y en letras negras mayúsculas la palabra "traidora". Cuestionado al respecto, acusó a los grupos de feministas que defienden la despenalización del aborto en Guerrero, ya que su hermana votó en contra de la iniciativa para despenalizar la interrupción del embarazo.
DJR.- "Seguramente la lona la colgaron el montón de señoras de edad muy avanzada, muy feas, que la mayoría de ellas se rumora que son lesbianas, aunque a mí parece que tienen toda la libertad de ejercer su sexualidad, son abortistas y están en la ruta de la alta burguesía trasnacional", expresó el dirigente de Grupo Guerrero, la fracción más importante del PRD en Guerrero.
Hace un año la periodista compartió el archivo de audio con la entrevista completa para que el que quisiera acceder al archivo lo hiciera, por eso pude constatar que no había "interpretado" las declaraciones de Jiménez Rumbo. Supo aprovechar su oportunidad, preguntó, obtuvo fuertes declaraciones que le valieron la admiración de sus compañeros y compañeras y lo más importante el entrevistado nunca le podrá reclamar alguna "mala leche" por buscar fama o por línea editorial. Son dos ejemplos, dos mujeres, una que es ejemplo de lo que no se debe hacer en el periodismo y menos en un medio de alcances significativos como es PROCESO, y otro el de una joven que tuvo la sagacidad e inteligencia en su investigación, ejemplo de lo que sí debe hacerse en el periodismo.
La entrevista publicada por la revista PROCESO, es un ejemplo de cómo no hacer periodismo, pues al lector se le da un trabajo que no corresponde a lo que el entrevistado declaró. Un buen reportero arranca declaraciones estando bien informado, siendo audaz no adoctrinado, siendo profesional no parcial. Citando a esa misma revista en la que mi padre Andrés Campuzano Baylón, fue corresponsal varios años en Guerrero, le hizo en una ocasión una entrevista al gobernador José Francisco Ruiz Massieu, en la que habló de cosas que propiciaron incomodidades en la clase política nacional.
Molesto ante la presión desde la capital del país, mandó llamar a mi papá y le reclamó: ¿pensé que éramos amigos? Al momento en que endurecía su rostro, pero la respuesta fue contundente: "soy su amigo señor gobernador, no su pendejo". Y ante la desafiante respuesta la sonrisa que se dibujaba en su rostro borró esa dureza del gobernante y reconoció que su enojo debía ser con él mismo por haber dicho lo que dijo.
Y la amistad duró, la amistad no se contaminaba con el trabajo que
cada uno de ellos desempeñaba. Si se hubiera cambiado la sintaxis o palabras que hubiera empleado el gobernador durante esa entrevista, pues él hubiera tenido todo a su favor para exigir el despido de un corresponsal que contaminaba al medio. Esa habilidad para conseguir declaraciones exclusivas se da leyendo libros, de todos los temas para que al momento de entrevistar a un astronauta se le pueda cuestionar sobre cosas que escapan del conocimiento de la mayoría de personas, los periodistas del siglo pasado no tenían Facebook, tabletas, teléfonos inteligentes, buscaban las fuentes primarias, a los actores políticos, confirmaban la información y hasta tener certeza de lo obtenido lo publicaban. No se andaban por las ramas.
¿Cuántas veces mataron al tigre Ankor que escapó en Coyuca recientemente?
¿Cuántas veces en redes sociales medios locales mataron a Gonzalo Rivas Cámara? Experto en informática que con extinguidor en mano intentó sofocar el fuego que habían prendido cerca de las maquinas que despachan gasolina en Chilpancingo, que sí murió pero tiempo después.
¿Cuántas veces mataron a Roberto Gómez Bolaños?
¿Cuántos nombres publicaron armando el gabinete del gobernador Astudillo?
¿Cuántas personas han sido ciber-asesinadas por ganar la noticia?
El caso de la agencia Quadratín en Guerrero es otro que debe mencionarse, como lo dije al principio todos cometemos errores, pero lo que no podemos cometer son imprudencias y en esa agencia de noticias han difundido en constantes ocasiones situaciones y asesinatos que luego tienen que bajar de su portal y desmentir. Si un medio de comunicación se tiene que desmentir, pues…, es el suicidio que cancela toda futura credibilidad y sin eso en el periodismo pues es tener nada.
El supuesto asesinato de una mujer dedicada desde hace años a vender comida -mejor conocida como "Cira La Morena- es la gota que derramó el vaso, uno opaco con olor a chuquía y fragmentado ante tanto desliz.
Esa agencia anteriormente en Guerrero ostentaba un fuerte referente, pero en la actualidad y posiblemente por cambios en su estructura y porque seguramente decidieron darles vacaciones a los encargados de manejar y corroborar la información.
Diversos medios en Guerrero han caído en la seducción de posicionarse en internet no importándoles el detrimento en su contenido y veracidad. Si quieren hacerlo deben buscar a los expertos que les brinden las herramientas necesarias para lograr su objetivo.
El gobernador Héctor Astudillo, los actuales alcaldes y diputados junto con sus equipos de comunicación deben saber escoger los medios locales a los que dan entrevistas para que sus declaraciones no sean desvirtuadas y se le siga abonando al permanente conflicto. No estoy diciendo que hagan una lista de clases, ni que se cancele la libertad de expresión o revanchismo contra otras personas de medios de comunicación. La crítica no lleva apellidos, la crítica no es diatriba, no busca denostar sino busca cambiar algo que no funciona, la apología en columnas de "analistas políticos" envenena a la democracia. Si le dan oportunidad a un reportero cuyo único objetivo -editorial y personal- es denostar pues luego no se defiendan con cartas aclaratorias especificando que eso no dijeron. Deben escoger gente profesional –porque existen en Guerrero- para comunicar sus ideas, acciones con periodistas comprometidos, con pasión por el oficio, nunca sumisos, profesionales de tiempo completo.
Otro caso es el del diario Metro, que pertenece al grupo Reforma, ese diario tuerce la información y encabezados a manera de albur, busca entretener no informar. Difundieron la noticia del actor Charlie Sheen; "Trae veneno en el pizarrín", el comediante hace unos días dijo ser portador del VIH. Muchos lo festejaron, rieron, pero una gran mayoría y al estar cerca el día primero de diciembre en que se conmemora el
Día mundial de la lucha contra el SIDA, pues reprobaron esa "broma" del periódico lo que ocasionó que el medio pidiera disculpas por el exceso.
Durante las visitas que hago al Distrito Federal, compró ese diario para contemplar las múltiples formas en que se maneja la información, un encabezado que me llamó la atención fue el caso de una joven que demandaba a otra por haberle engañado haciéndole creer que era hombre, la nota también la publicaba el diario Reforma, pero con un trato brutalmente distinto. Metro sentenciaba "Tornillo le resultó rondana".
En Guerrero es momento en que los medios de comunicación detengan la carrera cibernética, reflexionen y tomen medidas pertinentes como asignar jefes de contenido en internet, reporteros, reporteras con vocación de informar no de acrecentar su vanagloria.
Regresemos a lo básico, olviden su tecnología y comprueben la información, busquen entrevistas exclusivas, aunque otros les ganen la primicia, jamás les ganaran con una nota bien elaborada y nutrida. Poco a poco la euforia de ganar por ganar no suplantará más la ética y compromiso del periodista. ¿Recuerdan cuando no existían los celulares y tenían que asistir al evento político, al accidente en carretera, al asesinato de alguien y generar su propia información?
Y no copiar, pegar y publicar como ahora sucede. No fue hace mucho, no son mejores algunos medios de ahora que los del pasado, son veloces pero burdos.
El periodismo de interpretación ha sido malentendido en Guerrero, es subjetivo y lejos de acercarnos a un escenario de comprensión desde distintos ángulos en el corto o largo plazo, ha servido en este estado para lucrar y fomentar el activismo, para propagar el odio, acusar de ratero, asesino o pendejo a alguien –o varios- sin mayor evidencia más que la pasión, el rumor, sin pruebas y lo más doloroso es que desde esa posición algunos medios han recibido enormes cantidades de dinero. Les han premiado su bajeza.
Dilapidando su credibilidad lo único que se ganan es el desprecio y burla de una sociedad que merece medios de comunicación profesionales y con una vocación que no esté expuesta a la inmediatez de prostituirse por "likes o visitas".
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[1] El texto original de Éste artículo fue publicado por Agencia Quadratín en la siguiente dirección:
https://guerrero.quadratin.com.mx/PRD-no-lucha-por-homosexualeslesbianas- ni-abortistas-David-
Jimenez/