Todavía no empiezan las campañas para la presidencia municipal de Acapulco y ya se han desinflado muchos que contaban con “buen capital” para lograr sus propósitos, como es el caso de los priistas Rubén Figueroa Smutny y Fermín Gerardo Alvarado Arroyo; del PRD, el ex diputado federal Ramón Almonte Borja, y en el PAN, la sindicalista del IMSS, Digna Marroquín. En el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Marcial Rodríguez Saldaña, está “en capilla” por querer “mamar” por dos partes.
Y es que el buen ex rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), desea lograr la silla presidencial del municipio más importante del estado de Guerrero, pero sin dejar de cobrar las cuotas de la militancia, como presidente de la coordinación municipal de Morena.
Resulta que el pasado 15 de marzo, Morena realizó una asamblea con delegados estatales y nacionales con la finalidad de elegir a sus candidatos a diputados federales, locales, regidores, además de presidentes municipales.
Tras fuertes debates, se eligieron a militantes que reunían el perfil para regidores, y se logró el consenso para que el externo Arturo Flores Mercado fuera el candidato a presidente municipal de Acapulco. Pero la definición aún está pendiente, pues Rodríguez Saldaña también pretende la presidencia municipal.
Sin embargo, durante la selección de los candidatos el dirigente municipal Marcial Rodríguez, según la propia militancia, entre los que destacan Ubel Hernández López, Marbella Amada Marbella, Alejandra Justo Garzón y Allan Arguello Alba, realizó duplicidad de funciones y actuó como “juez y parte”, por lo que fue impugnado ante el Tribunal Federal Electoral (Trife).
Ante ello, el Trife resolvió multar a Morena municipal (o sea a Marcial Rodríguez) con la cantidad de 125 mil pesos, y le dieron un plazo de 24 horas para que informaran o se inconformaran por el caso, pero no hubo contestación de parte de los líderes municipales.
Es claro que las bases no apoyan a Marcial Rodríguez, quien utiliza a Morena como su “feudo personal”, pues si es aspirante a la presidencia municipal, debió de haber solicitado licencia desde hace más de un mes (son dos meses antes del registro oficial).
Los inconformes piden que Marcial Rodríguez Saldaña sea cesado como dirigente y que se le imposibilite a participar en el proceso electoral del 7 de junio, además, hicieron un llamado a César Núñez Ramos que reflexiones y deje de apoyarlo.