+Su rival, en el lugar 68 del ranking de la FIFA
+El Tri, dirigido por Gerardo Martino, respira en su penúltimo partido de preparación
+Antes del debut frente a Polonia en el Mundial, el 22 de noviembre
Ciudad de México, (BALÓN CUADRADO/Agencias).- El tic tac suena para Gerardo Martino como quien llega al cadalso.
El polémico estratega argentino vive el momento cúspide en su papel como entrenador de los súper Ratoncitos Verdes.
Cualquier fallo, sabe, es carne para las feroces críticas que no soportan la forma gelatinosa en que dirige al Tri.
Aunque, en sentido estricto el problema histórico del balompié nacional, en cuanto a representativos mundialistas, no es él ni los jugadores –a quienes culparán, se antoja, de otro virtual fracaso—sino los zares de la pelota que mantienen su misma política empresarial/deportiva hace más de medio siglo.
En la noche de Girona, en España, la selección mexicana venció 4-0 a Irak sin problema alguno. La victoria es un impulso de amor propio para un equipo que ha estado rodeado de incertidumbre en los últimos meses previo al Mundial.
Frente a Irak --lugar 68 del ranking de la FIFA--, y sin algunos de los futbolistas que juegan en Europa, México presentó una alineación muy cercana a la definitiva que se verá en el debut contra Polonia (22 de noviembre, 10.00 horas).
Si algo ha dado luz al proyecto de Tata Martino ha sido renovar el medio campo con Carlos Rodríguez y Luis Chávez, además de tener un hombre creativo desde la izquierda como es Alexis Vega.
En las eliminatorias dio su respaldo y poco a poco los jóvenes han respondido.
La selección mexicana jugaba muy suelta, como si hubiesen recuperado ese último toque de autoestima.
En los primeros minutos una estupenda asociación entre Luis Chávez en el centro y la banda izquierda con Jesús Gallardo terminó con una barrida de gol de Alexis Vega para el 1-0 en los primeros cuatro minutos.
El primer tiempo fue un manjar para el Tri que necesitaba recuperar el balón, la posesión y el protagonismo. Irak no existió.
En el segundo tiempo, Martino hizo seis cambios para intentar darle oportunidad al resto de convocados.
Esa apuesta volvió a funcionar porque apenas había sonado el silbatazo y Uriel Antuna se escapó por la banda para ponerle medio gol a Rogelio Funes Mori, quien tomó un impulso.
El tercer gol fue un letal tiro de Gallardo, uno de los experimentos exitosos del antiguo entrenador, el colombiano Juan Carlos Osorio.
México solventó el partido ante un débil Irak que le sirvió de buen sparring. Ya en el último minuto, Antuna se encargó de cobrar un penalti.
Un partido redondo para México, de esos que extrañaba.
Aunque contra un rival a modo.
El argentino debe cortar su lista de 30 jugadores a 26. Ya borró definitivamente a Jesús Tecatito Corona por una lesión en agosto. Ahora está en espera de que Raúl Jiménez pueda recuperarse de una pubalgia en tiempo récord. Para Martino, Jiménez, aún lesionado, es favorito para ir a Qatar por encima de Santiago Giménez, delantero de 21 años en el Feyenoord.
Este ha sido crucial para que el club neerlandés avanzara de ronda en la Europa League.
El estratega del Tri ha insistido en que convocar a cuatro delanteros es un exceso, pese a que ese fue su principal problema durante las eliminatorias.
Otra decisión que suscita polémica es la de querer cortar a otro joven con proyección: Diego Lainez.
Los futbolistas mexicanos, al menos los de la Liga mexicana más Héctor Herrera de la MLS, iniciaron su campamento de preparación desde el 17 de octubre.
La última escala antes del debut en Qatar será contra Suecia el 16 de noviembre (13.30 horas).
(Con información del diario El País)