La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, criticó la política de vivienda durante la administración de Miguel Ángel Mancera en la Ciudad de México, acusándola de promover la vivienda de nivel medio alto y alto, lo que derivó en un proceso de gentrificación.
Señaló que esto provocó el desplazamiento forzoso de los habitantes originales, beneficiando a las inmobiliarias privadas. Según Sheinbaum, se utilizaron mecanismos como el aumento del predial para precarizar la vida de los residentes y obligarlos a abandonar sus viviendas, las cuales posteriormente eran adquiridas por desarrolladores inmobiliarios.
Para contrarrestar esta situación, el gobierno federal planea construir un millón de viviendas a nivel nacional durante el sexenio, en colaboración con el Infonavit y la Conavi, con el objetivo de asegurar la producción de vivienda social a precios accesibles.
Sheinbaum afirmó que si bien la construcción de vivienda de nivel medio alto y alto es necesaria, es fundamental que se equilibre con la producción de vivienda social para evitar la exclusión de los habitantes de bajos recursos.
Así también Clara Brugada Molina, jefa de gobierno de la Ciudad de México, señaló se empleará un presupuesto de 10 mil millones de pesos, en 2025, para la construcción de vivienda, como dijo el pasado miércoles durante la entrega de 89 hogares a personas en diferentes alcaldías de la capital. Se realizarán en su administración, continuó, 200 mil acciones de vivienda.