Kim Kardashian se ha visto obligada a lanzar un comunicado a través de sus redes sociales después de que su nuevo proyecto haya levantado una gran polémica, principalmente en Japón. La empresaria estadounidense había anunciado hace unos días el lanzamiento de una línea de ropa interior cuyo objetivo es moldear la figura femenina y que llevaría por nombre Kimono. Enseguida se produjo un aluvión de comentarios en Internet que acusaban a Kim de apropiación cultural, y a tal punto ha llegado la situación que la celebrity ha tenido que dar marcha atrás.
Ante semejante escenario, Kim Kardashian ha optado por publicar un extenso comentario desde su perfil de Instagram anunciando que aceptará las peticiones de los japoneses y cambiará el nombre, asumiendo así su error. "Ser una empresaria y mi propia jefa ha sido uno de los desafíos más gratificantes con los que he sido bendecida en toda mi vida. Lo que lo ha hecho posible para mí después de todos estos años ha sido la comunicación directa con mis seguidores y mi público", comenzaba explicando la empresaria.
"Siempre escuchando, aprendiendo y creciendo, así que aprecio la pasión y las diferentes perspectivas que las personas me brindan. Cuando anuncié el nombre de mi línea moldeadora, lo hice con la mejor intención. Mis marcas y mis productos se construyen con la inclusión y la diversidad como base y después de un cuidadoso planteamiento y consideración. Voy a lanzar mi marca bajo un nuevo nombre. Gracias por su compresión y apoyo siempre", concluyó.
El asunto no está cerrado
La publicación ha rozado los 3 millones de likes y ha sido muy aclamada en la zona de los comentarios gracias a la rectificación de Kim. Sin embargo, el asunto no va a terminar aquí, porque las autoridades de Japón ya aseguraron que iban a acudir a la oficina de patentes de Estados Unidos para que se realice un "examen exhaustivo" de la situación.