El diputado local perredista Sebastián de la Rosa Peláez exhortó a los trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo afiliados a la Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), quienes este martes tomaron la sede del edificio edilicio, ’a no claudicar en su lucha’ para mejorar sus prestaciones laborales.
Toda vez que el tema de los derechos laborales ’no debiera estar sujeto a la voluntad’ del alcalde priista Marco Antonio Leyva (MAL), ni de cualquier otra institución, porque reveló que ’por eso cada año se realiza una planeación presupuestal’.
Denunció que el Ayuntamiento de Chilpancingo es una institución que ’le paga a sus empleados salarios muy miserables, que no corresponden’, ni siquiera por el nivel de jerarquía política que tiene esta capital.
Señaló que Leyva Mena no sólo defraudó a sus electores sino también a él, que dijo cuando ganó que realizaría un buen gobierno por la experiencia que traía en lo administrativo y en lo político.
Sin embargo, para De la Rosa Peláez el alcalde MAL defraudó a la sociedad, porque ha sido incapaz de atender la problemática que existe en el municipio, como la inseguridad, la basura, el agua, alumbrado público, falta de obras y atención a las distintas área del gobierno municipal, hechos por los cuales ’a cada rato le bloquean calles o le toman las oficinas’, precisó.
Existe ’total incapacidad en políticas administrativas por parte del presidente municipal’, además de que demuestra insensibilidad al no reconocer una serie de derechos laborales de sus empleados.
El legislador perredista dijo que el alcalde MAL se quejará toda la vida de la falta de dinero para solucionar algunos problemas que le aquejan, si es que no tiene una buena planeación económica para solucionar los problemas y brindarle atención a la sociedad.
Insistió que el tema de los derechos laborales no debiera estar sujeto a la voluntad del alcalde de un municipio ni de otra institución, porque se debe dar el reconocimiento de las actividades que los trabajadores desempeñan.
Por eso instó a los trabajadores a no perder su capacidad organizativa, ’tienen que ejercer su derecho, hacer un planteamiento que corresponda a las circunstancias y mejorar los salarios miserables que les otorgan’.