Quienes lo tenían pretendían entregarlo a la Profepa pero enfermó y murió
Una cría de onza, felino endémico de la sierra de Atoyac, también conocido como Jaguarundi, la cual, mantenían en cautiverio, murió encerrada en un domicilio, momentos antes en que promotores del Proyecto Guerrero Jaguar, pudieran rescatarla para entregarla a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
De acuerdo con el promotor del proyecto, Cuauhtémoc Contreras Javier, derivado del revuelo del caso de Xóchitl, la cachorra de tigrillo rescatada y entregada a la Profepa en días pasados, les llegó la noticia de que había otro cachorro en Atoyac que tenían en cautivero, esta vez era una cría de herpailurus yagoauroundi o Yaguarundi, Jaguarundi u onza; ’había el interés dijeron, quienes lo tenían, de realizar su entrega también, sin embargo desde la primer fotografía que enviaron la cría ya se apreciaba muy mal, y murió prontamente’.
El ecologista dijo que ’por ello se destaca una y otra vez, el llamado de no comprar, no agarrar, no vender, ningún animal silvestre, ya que no son mascotas, no se van a domesticar, lo que sucederá es que se mueran en su mayoría, aparte de que implica sanciones por la autoridad competente, y se le hace un grave daño al ecosistema’.
A una semana de que entregaron a Xóchitl, una cachorra de tigrillo (leopardus wiedii) a la Profepa, mencionó que este gatito montés actualmente es atendida por veterinarios del zoológico Zoochilpan de Chilpancingo y se prepara para reincorporarse a su hábitat natural.
’Llamamos a la ciudadanía de Atoyac y del estado a que cuide nuestra flora y fauna, a que apoye su conservación, a que se sume a la petición de contar en el estado con un área donde las especies recuperadas o rescatadas, se puedan mantener por un tiempo determinado bajo los cuidados necesarios, para retornar a su hábitats y no mueran en los domicilios por falta de alimento adecuado y libertad’.