El sector de naves industriales en México apunta a superar récords de ocupación en 2024, a pesar de los desafíos económicos y políticos nacionales e internacionales. Este crecimiento se debe al auge del nearshoring, la relocalización de empresas manufactureras y logísticas.
Solili, firma de consultoría, reporta una demanda acumulada de 5.9 millones de metros cuadrados al cierre de noviembre de 2024, un 15% más que en el mismo periodo del año anterior.
Entre octubre y noviembre, más de 70 nuevas inversiones generaron un arrendamiento de 860,000 m² de espacio industrial 8 . La alta demanda en manufactura y logística impulsa la construcción de nuevos proyectos, con 5.8 millones de m² en obras a lo largo del año.
Solili concluye que este crecimiento en la demanda y construcción refleja la confianza de los inversionistas, superando los niveles de 2023 y adaptándose a las necesidades del comercio electrónico, manufactura y logística, proyectando un cierre de año sólido para el sector inmobiliario industrial.
’El crecimiento en la demanda y las construcciones industriales demuestran la confianza de los inversionistas. El arrendamiento industrial anual ya ha superado los niveles del 2023. El mercado está adaptándose a las necesidades de sectores clave como el comercio electrónico, la manufactura y la logística. Con un inventario en expansión y una demanda creciente, el sector inmobiliario industrial está preparado para cerrar el 2024 con solidez’, se puede leer en el análisis de Solili.
A partir de la reconfiguración de las cadenas de suministro a nivel mundial, durante y después de la pandemia, el sector inmobiliario industrial mexicano tuvo uno de los mayores crecimientos en su historia.
Al cierre del onceavo mes de este año, el inventario industrial nacional fue de 103.5 millones de metros cuadrados, con un incremento anual del 11%, según Solili; sin embargo, el efecto nearshoring no ha sido homogéneo en todo el país.
Los ocho mercados industriales que componen la región norte mexicano concentran el 50% de la demanda de naves industriales. A su vez, los hubs industriales del Bajío aportaron 22% de la ocupación nacional.
La desarrolladora de inmuebles industriales Meor, por ejemplo, apostó por una estrategia de crecimiento en el norte del país, en donde mantiene tasas de ocupación que rondan el 96 por ciento. La compañía proyecta cerrar el año con más de 250,000 m2 de nuevas construcciones y 100,000 m2 en arrendamientos en la zona.
"Nuestro compromiso con la rentabilidad se basa en una visión a largo plazo, donde la calidad de nuestros desarrollos y los clientes AAA son pilares fundamentales. Buscamos generar valor no solo para nuestros inversionistas, sino también para las comunidades donde operamos, impulsando el desarrollo económico y la creación de empleos", afirmó Alberto Bessoudo, director de Finanzas de Meor.Con información de EL ECONOMISTA