Para cerrar el año sin compromisos con la anterior legislatura, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), del Congreso de Guerrero, Jesús Urióstegui García, gestionó una ampliación del presupuesto, por 110 millones de pesos, con el objetivo de pagar liquidaciones del personal que laboró con las diputadas y diputados, de la 63 Legislatura.
Y es que según la ley, todas las trabajadoras y trabajadores de confianza, que labora con las y los diputados, tienen contratos que culminan el último día de la legislatura (31 de agosto) y debe liquidarse conforme a derecho.
A decir de los mismos legisladores morenistas y de oposición, Urióstegui García ha entablado una comunicación estrecha con el Poder Ejecutivo guerrerense, con el objetivo de promover proyectos e iniciativas que garanticen la transformación de la entidad.