Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
Durante los cinco años y pico transcurridos del actual gobierno, prácticamente no ha existido un solo día que el mismo Presidente no dé la nota disonante, por más que le afinen la voz con inteligencia artificial. Pero últimamente, podemos asegurar que ha sido en acabose. O está demasiado irritado y despotricando contra todo lo que se mueve o emitiendo esa sonrisa sarcástica imborrable o está diciendo más de las ochenta y tantas mentiras diarias o está defendiendo a sus incondicionales o…
Obviamente, ese teatro en donde suele soltar todo el veneno que almacena, así como las mieles para sus familiares corruptos, funcionarios que suele defender, comúnmente con un ’yo le tengo toda la confianza’ y las órdenes destructoras al Congreso morenista; alimenta el almacén de los politólogos, de los analistas políticos y de los articulistas, que no tienen que hacer mucho esfuerzo para encontrar el tema del día. Es de agradecerse ese gesto bondadoso.
Últimamente ha mostrado un pergeño de pocos amigos. Las cosas no le han salido nada bien. Los periodistas incómodos le descubren a él, a sus funcionarios y a sus familiares, nuevos actos reprobables.
Tanto da para la crítica, que luego se amontonan los temas de interés nacional e internacional en contra suya. Las redes sociales están repletas de contenido agresivo para él y para los suyos, mientras el país arde en manos de la violencia desatada como nunca, gracias a su ridícula frase que los alienta: abrazos, no balazos.
El tema de hoy habla de la fiscal carnal, Ernestina Godoy, quien a su paso por la Fiscalía del gobierno capitalino, se ocupó en transgredir la ley de acuerdo con las órdenes de su jefa Claudia Sheinbaum, hoy opaca y desangelada pre candidata a la Presidencia de la República. Los cargos son hoy, no para servir al pueblo, sino a los jerarcas que les confieren el trabajo.
Durante el sexenio, ha sido una constante la designación de funcionarios plagiarios de tesis. La ex fiscal, impedida para continuar en el puesto otros cuatro años, es sólo otra, pero con la promesa de ser convertida en senadora, más que nada, para asegurarle el fuero que impedirá su encarcelamiento.
Las denuncias en su contra, después del fallo en el Congreso que impidió su ratificación como fiscal de la Ciudad de México, menudearon inmediatamente. Hay quien consideró increíble que no estuviera a cargo de su defensa en un merecido juicio por haber inventado delitos a funcionarios que se confrontaron con su ex jefa, ahora candidata. ’Por haber perseguido y encarcelado sin pruebas a quienes su patrona considera enemigos políticos suyos o por haber sido omisa en investigaciones como la de la línea 12 del Metro’.
Sobre la investigación del colapso de la línea 12, en donde murieron casi una treintena de pasajeros, quedó publicado de la siguiente manera: ’a las 10:25 pm se colapsaron dos vagones, pero las actas de defunción de las personas y de los menores de edad que perdieron la vida tenían como hora de defunción las 9:00 pm’. Tan incapaz como burda hasta para inventar.
Rosario Robles habló de la licencia falsa que le fabricaron. Dijo además: ’En los reclusorios hay cientos de mujeres sin recursos que esperan sus procesos, pero, a miss Moni, audiencia tras audiencia porque había que juzgarla antes del 19 de septiembre. La dueña del Rébsamen está en la cárcel porque era la dueña. ¿Qué pasa con el dueño de la constructora de la Línea 12?’.
Los pecados son cuantiosos y por esta razón, difícil de enumerarlos. El sustituto es Ulises Lara López, ex cuñado de Martí Batres. Es licenciado en Sociología, solo que la Ley Orgánica exige la licenciatura en Derecho y mínimo cinco años de ejercicio.
Pero curiosamente, este año que apenas comienza, apareció ya con este título con fecha 2024, otorgado por la Universidad Cúspide de México, avalado por la SEP. Obviamente, al servicio de los que hoy mandan. ¡Qué vergüenza!
ariosruiz@gmail.com