En el ISSSTE de Coahila, trabajadores roban medicamentos y tratamientos costosos, lo reparten entre el personal administrativo y lo ponen en venta en farmacias ’patito’.
’Retiran el medicamento ocultándose de las cámaras y lo reparten entre los empleados, dizque que con recetas, pero qué raro que sean sólo medicamentos costosos y de tratamientos como cáncer o diabetes’, comentó Bernardo Moreno Barajas trabajador de la misma dependencia.
Precisó que hay una persona encargada de realizar los traslados, pero consideró que hay más pues es toda una mafia. Recordó que recientemente sacaron 100 soluciones para inyectar medicamento para las rodillas y en lugar de suspenderlo o sancionarlo, la Delegación lo cambió solamente a fines de semana para que nadie lo viera.
’El medicamento lo sacaron hasta de su casa, pero el delegado lo protegió. El robo de medicamento no para, más el robo hormiga dentro de la clínica’, reiteró Moreno Barajas para el diario Zócalo.
El servicio del ISSSTE en la entidad actualmente de acuerdo a los derechohabientes, se encuentra en su peor momento, sin abasto de medicamentos, con pacientes en los pasillos de los hospitales, cirugías y tratamientos detenidos o pospuestos, y sin recursos suficientes.